Se subio un payaso al camión. Era viejo y no estaba bien carácterizado. Usaba un anticuado traje arrugado y sus zapatos tenian agujeros enormes. Francamente solo se le podía considerar payaso por que tenía un poco de pintura alrededor de la boca y llevaba una nariz roja de plástico.
Ejecutó su rutina y fue ignorado olimpicamente por el respetable. El clímax de su acto llegó cuando preguntó a los pasajeros por que lloraba Pancho Pantera. Nadie respondió. Segundos después la respuesta llegó: Porque chocó milk. Nadie sonrió siquiera y no recibió una sola moneda. Solicitó la parada vociferando y al bajar gritó: Chinguen todos a su madre.
3 comentarios:
pinche bola de insensibles, yo también les hubiera dicho lo mismo.
Es muy bueno, malditos putos!
Jajajaja qué cagado! No le dieron nada y les mentó la madre! chale...
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