viernes, marzo 31, 2006

Pastel de turrón con pistachos.


Cuando jaimito era niño su mamá le dijo que el diablo vivia en la estufa, que no se acercara. Jaimito pasó noches en vela preguntandose por que el diablo había escogido un lugar tan feo para vivir. Su abuela le dijo que en realidad esa solo era la puerta, y que ella ya había entrado varias veces, pero que los niños no podían entrar, por que si entraban, los reyes magos no les llevarían regalos.
Cuando jaimito cumplio diez años, su abuela decidio hornearle un pastel. Cuando la abuela se agacho para meter el pastel al horno, jaimito la vio y pensó que quería ir de visita al infierno, así que puso sus manos en sus nalgas y empujó.
La abuela de jaimito soltó un grito ensordecedor cuando su cara toco el interior del horno precalentado a doscientos veinte grados, tal y como indicaba la receta del pastel de turrón con pistachos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahh que Jaimito tan travieso.

Anónimo dijo...

abuelita dime tu......